domingo, 11 de septiembre de 2011

Resortes y el Mambo No 8


Debe ser extraordinario y extraño que alguien como yo de nuestra llamada generación de la tecnología se encuentre disfrutando de peliculas en blanco y negro. Según mi antiguo pensar ver una pelicula en blanco y negro era algo era una aversión para la tecnología y las cómodas costumbres de la vida contemporanea, si bien he de confesar que era un completo idiota. Pasando por el internet en busca de videos de Dámaso Pérez Prado, una busqueda que hacía para ampliar mis conocimeintos musicales y quizá de inspiración para nuevos ritmos, me encontré con la prodigiosidad de este autor, importado de Cuba para México, un arte que los ignorantes americanos llamarían surreal, como todo lo que se hace aquí en México, para ellos América Latina es una versión surreal de su estilo de vida.
Dámaso, tan profesional como la gente estudiada en cuestión de música, numera sus compoisciónes de sus diferentes Mambos en cada titulo. Ver como toca el piano es extraordinario, ese despreocupado y aventado movimiento de sus dedos sobre las teclas le hacen al publico pensar que es tan facil tocar lo que esta tocando, pero alguien que sabe un poco de musica sin duda se queda boquiabierto de lo que acaba de ver.
Entonces vi este video de Resortes, cuando era niño, Resortes ya estaba viejo, siempre recuerdo haberlo visto en la televisión, su misma cara parece un chiste, un chiste muy bien contado y que no se olvida al pasar de los años. Poco sabía de porque le decían Resortes, este video lo explica todo, desde el comienzo Dámaso pone a tocar la orquesta y empieza a sonar el Mambo numero ocho, que rico el mambo, se puede ver en esa pantalla plateada como de mano izquierda hace su presencia Resortes, junto con una bailarina, dandole la razón de su apodo, bailando de una manera tan singular y chistosa, aparece con un sombrero de tamaño exagerado agregando comicidad al asunto, lo pone en el piso, y hace de las suyas. Resortes empieza a bailar con unos movimientos exagerados, moviendo su cuerpo de manera en que todas sus extremidades parecen resortes al son del mambo, con una perfecta aromnia y un perfecto sentido de ritmo y cordinación de baile con la canción, aprovecha los silencios de una manera grandiosa y hace un perfecto arte de performance que muchos artistas en la actualidad envidiarían.
A continuación despues de un silencio, resortes se queda inmovil y de brazos cruzados, dejando que la bailarina haga sus pasos de baile a su alrededor, efectuando también la danza del mambo de una manera muy profesional, entonces es cuando se revierte el caso, una vez inmovil la bailarina, Resortes empieza a bailar a su alrededor de manera comica y hasta le planta un beso aprovechando la inmovilidad de su compañera, con lo que termina las paralisis y salen de toma mientras bailan. Lo que sigue del video es que unas personas que estaban en un balcón observando todos los movimientos del baile, se unen a la fiesta y se ponen entre los bailarines y la orquesta de Mambo de Dámaso, y en un estridente sonar de la sección de metales de manera aguda se termina magistral mente el mambo, un final agudo, pero con un buen sabor de boca, con una buena posición para final de pelicula, donde todo se hace celebración y baile, porque despues de todo, América Latina se caracteriza por el ritmo, una fusión de tantas culturas, negra, blanca indigena, ha dado riqueza y diversidad a este territorio, y mas que nada, felicidad.

Maaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaambo Juuuuuuuuuuuuuuuuuuu!

1 comentario:

Edgar dijo...

Patrimonio cultural el de estos dos hombres. Hay tanto cine mexicano tan bueno que deberíamos de rescatar. Por otro lado hoy fui a la exposición del museo de historia de los 60s y me encontré a Perez Prado, me acordé de mi abuelo. Buen post!